Cuidemos la Familia
Era la noche de 24 de diciembre. Jesucristo, Eterno Dios e Hijo del Padre Eterno, quiere consagrar al mundo, con su misericordiosa venida, en una caverna abierta en las entrañas de una roca, donde suelen guarecerse pastores y rebaños. La Virgen María, sabiendo que el momento está cerca, se recoge en profunda oración. José la contempla en religioso silencio, orando también.
Día de la Iglesia Diocesana 2010
La Iglesia, comunidad de fe, caridad y esperanza
Queridos diocesanos:
El domingo 14 de noviembre, celebraremos el día de la Iglesia diocesana bajo el lema La Iglesia: comunidad de fe, caridad y esperanza. Con esta jornada pretendemos acrecentar la conciencia de que por el bautismo pertenecemos al Cuerpo de Cristo, que es la Iglesia, a la que debemos amar y servir con todo nuestro ser. Para ello, al recibir las aguas bautismales, Dios nos infunde las virtudes teologales, fe, esperanza y caridad, gracias a las cuales podemos mantener nuestra vida cristiana. Por la fe, creemos en Él, como Verdad absoluta; por la esperanza, lo deseamos como plenitud de nuestra felicidad; y por la caridad, lo amamos por encima de todas las cosas. Sin estas virtudes no podemos ser cristianos ni vivir plenamente como miembros de su Iglesia.
Día de los si Techo
Nadie sin derechos. Nadie sin hogar
Las Campañas de las Personas sin Hogar, los Días de los sin Techo, de los próximos cinco años vuelven -volverán cada mes de noviembre- a gritar ante la sociedad y ante todos nosotros, que todo ser humano tiene derecho a vivir su dignidad, única, esencial, irrepetible e imborrable.
Nuestra Señora de la Almudena
La ciudad de Madrid honra a su patrona
Es bueno remontarse al pasado para conocer los orígenes y no perder el verdadero camino en el futuro. Celebramos el día 9 de noviembre la fiesta de la Virgen de la Almudena. Su fiesta nos empuja a dirigir la mirada, ayudados por la tradición y por la historia, a un pequeño villorrio visigótico, cuyo nombre ni siquiera ha llegado a nosotros, en el que se veneraba una Imagen, llamada “Santa María de la Vega en su Concepción Admirable”, posiblemente por estar enclavada su pequeña capilla en la ya denominada Cuesta de la Vega. Al producirse la invasión musulmana, los cristianos que le daban amoroso culto resolvieron esconderla por temor a que fuera profanada. Y así lo hicieron.